Madura

Despues de algún tiempo aprenderás la diferencia entre dar la mano y socorrer a un alma. Y comprenderás que amar no significa apoyarse, y que compañía no siempre significa seguridad.
Comenzarás a aceptar tus derrotas con la cabeza erguida y la mirada al frente, con el aplomo y la seguridad de un adulto y no con la tristeza de un niño.
Comprenderás que lleva años construir confianza, y apenas unos segundos para destruirla.
Aprenderás que las verdaderas amistades continuan creciendo a pesar de las distancias y las dificultades, y que no importa qué es lo que tienes, sino a quién tienes en tu vida.
Y que los buenos amigos son la familia que nos permitimos elegir.
Descubrirás que lleva mucho tiempo llegar a ser la persona que quieres ser, y que el tiempo es corto. Aprenderás que los héroes son las personas que hicieron lo que era necesario, enfrentando las consecuencias.
Descubrirás que algunas veces, la persona que esperas que te pisotee cuando caes, tal vez sea una de las pocas que te ayuden a levantarte. Madurar tiene más que ver con lo que has aprendido de las experiencias que con los años vividos.

Aprenderás que cuando sientes rabia, tienes derecho a tenerla, pero eso no te da derecho a ser cruel.
No siempre es suficiente ser perdonado por alguien, tendrás que aprender a perdonarte a tí mismo.
Aprenderás que no importa en cuantos pedazos se partió tu corazón, el mundo no se detiene para que lo arregles.
Entonces sabrás lo que realmente puedes soportar, que eres fuerte y que podrás ir mucho mas lejos de lo que pensabas cuando creias que ya no se podía más.
Y ES QUE REALMENTE LA VIDA SOLO ES PLENA CUANDO TIENES EL VALOR DE ENFRENTARLA.